OPINIÓN: La mala gestión financiera y las nefastas consecuencias para docentes, asistentes de la educación y estudiantes de Loncoche
MANUELA VASQUEZ C., Mg. EN EDUCACIÓN MENCIÓN EVALUACION, DOCENTE DE LONCOCHE

“No podemos esperar resultados positivos de un sistema educativo que no recibe el apoyo financiero adecuado”
La educación en Loncoche está en crisis. Pero se acallan las voces diciendo que esto es a nivel país”, “total no importa tanto si todos estamos iguales”, aplicando la ley del empate que se utiliza para diluir las responsabilidades que les corresponden como consecuencia de sus acciones, así entonces esto justifica la crisis de mediocridad, la mala gestión, la mentira, la falta a la probidad y toda gestión que daña las escuelas municipales donde asisten los alumnos más vulnerables de la comuna.
Para alivianar la carga y mantener a los críticos tranquilos, se hacen reuniones de trabajo, se firman compromisos que luego no se cumplen , aumentando las frustraciones de nuestras comunidades educativas, las que evidentemente comparten las mismas carencias, cuestión que se concluyó en una de las reuniones de reflexión realizada durante el paro de dos días de las escuelas y liceos del país, al que se sumó un tercer día de paro en nuestra comuna, que fue un paro de protesta local por las carencias de mobiliario, materiales de estudio, materiales de librería, de laboratorio, de personal y de salidas pedagógicas, entre otras tantas, que son deber del o la sostenedor/a, (al parecer el alcalde entregó ese tan preciado cargo a la actual Daem) proveer y que hoy se pretenden adquirir con rifas, bingos y otras actividades que permitan juntar el dinero necesario peso a peso.
Muchas pueden ser las causas de estas carencias que hacía al menos 10 años antes del 2021 nunca vimos. Resulta insólito que a los docentes se les diera razones bien ambiguas cuando asistieron en diciembre del 2024 la Daem(s) y el jefe de finanzas a los establecimientos de la comuna en donde dieron a entender que se estaba comprando lo requerido por los establecimientos sin tener el presupuesto por cada subvención y que en ese momento se habían ajustado las cuentas y entonces SÍ que estaba todo ordenado. Yo me pregunto: ¿Cómo pudo ser esto posible?, ¿Como apareció el dinero en diciembre y en marzo ya no estaba?, ¿Cómo antes del 2021 incluso se nos instaba a los directores de la época a hacer los gastos con celeridad para cumplir los porcentajes de gastos exigidos por MINEDUC?. Algo no cuadra aquí, alguien restó en vez de sumar y por qué no decirlo se realizaron compras y contrataciones innecesarias, traslados de personal sin hacer un estudio previo, sin planificar, porque alguien se olvidó que en Educación se planifica, se evalúa y se retroalimenta, todo con el fin de hacer las cosas bien, con celeridad y responsabilidad.
Quiero responder algunas de las interrogantes del joven estudiante del Liceo Bicentenario Padre Alberto Hurtado, estudiante Aníbal Moncalves, quien al ver a sus compañeros almorzando de pie en el casino del liceo se preguntaba, ¿dónde están las sillas? Yo les sugiero que las busquen en el recinto de la Expo Loncoche. Ustedes se preguntarán por qué digo esto y la respuesta es que estando aún en mi cargo como Daem de Loncoche, en la primera Expo Loncoche que le correspondió gestionar a la administración actual, se le instruyó a uno de los funcionarios del departamento contratar los servicios por trato directo para arreglar alrededor de 100 sillas y 30 mesas de comedor porque se requerían para el “patio de comida” del recinto Expo. Este mobiliario se encontraba dado de baja por los establecimientos y se guardaban en bodegas del Daem. El compromiso era que serían devueltas a Educación una vez terminada la fiesta, cuestión que nunca ocurrió a pesar de la insistencia mía y la del funcionario aludido. Afortunadamente logramos rescatar algunas mesas y sillas que fueron destinadas a la escuela rural Wenuy Kudau (adjunto fotos del mobiliario aludido). Creo que hoy, con la escasez de recursos es justo que el administrador municipal cumpla su palabra y retorne el mobiliario que tanta falta hace en los establecimientos, porque si bien son necesarios en el patio de comida de la Expo, la prioridad debiera ser educación, teniendo presente, además, que los recursos invertidos, aproximadamente 2 millones de pesos, eran y son de educación.
Esta mala gestión de los recursos de educación tiene el sistema educativo de la comuna en condiciones de precariedad y con resultados nefastos para los funcionarios de las comunidades educativas. Solo debemos esperar que surja un milagro y después de la auditoría que supuestamente se haría en educación, aparezcan los recursos “perdidos” y nuestros estudiantes reciban lo que les corresponde por derecho propio a través de las subvenciones recibidas.














0 comments